Dos fantasmas y una muchacha
En tiempos de Don Porfirio, Pérez y López se matan en plena función por el amor de la vedette Ana. Debido a ello, sus fantasmas son condenados a penar por el teatro hasta que se hagan amigos. Cincuenta años después, ambos son puestos a prueba por el jefe para determinar si podrán salir, pero solo si aceptan sacrificar sus poderes.