Frente al pecado de ayer
Luis Gustavo, un joven adinerado, se encarga de la administración de una finca y se enamora de una hermosa campesina llamada Lucecita. La familia del muchacho se opone y llega al extremo de querer enredarla con otro hombre que la ama. En defensa propia, para salvar su honor, la joven hiere al que intenta violarla y es enviada a la cárcel. Pero el fiscal, quien resulta ser el padre de su novio, pide para ella una condena excesiva. Ante esta injusta situación, la madre de la muchacha decide visitar al acusador y, al reconocer en él a un antiguo amante, le hace creer que la prisionera es hija de ambos, revelación que lo conduce a retirar los cargos en contra de su supuesta descendiente y sale en libertad. A pesar de todo, ella no desistirá hasta reencontrarse con su gran amor.