La guardadora de secretos
Emily es una joven violoncelista de catorce años que se pierde las vacaciones de verano con sus amigas del campamento porque se quiere presentar a las audiciones para una orquesta sinfónica. El verano se le está haciendo más pesado de lo que esperaba, ya que su madre está embarazada y parece mucho más preocupada por el nuevo bebé que está en camino que por ella. Aburrida por la situación, decide montarse su propio negocio: cobra cincuenta céntimos por cada secreto que guarda a los niños del vecindario. Cuando una nueva familia se muda al lado de la casa de Emily, el hijo de estos, Philip, de doce años, se vuelve su amigo. Finalmente, el peso de los secretos que Emily guarda convierten su vida temporalmente en un desastre total.