Nadie sabe para quién trabaja
Arturo, un tinterillo que dirige una oficina de asesoría legal en Bogotá, conoce a Simón, un hombre que tiene la oportunidad de heredar una fortuna a la cual en realidad no tiene mucho derecho, ya que su fallecido familiar no dejó ningún tipo de testamento. Arturo se aliará con Antonia, una contadora independiente, para reclamar la herencia, cruzándose en el camino con todo tipo de personajes que harán incluso más complicada la situación.