Una mujer en la calle
La prostituta Lucero, escapando de la policía, se refugia en la casa de la ingenua anciana Nena. Ésta y su rígida hermana mayor, Isabel, ambas solteronas, viven juntas. Sin embargo, el explotador de la chica quiere que robe a las viejas, pero cuando van a hacerlo, una de ellas enferma y la joven se ocupa de atenderla, pidiéndole a Fernando que la deje.