Loco por ella
Cuando Kassie cumple los cuarenta y sigue sin encontrar a su príncipe azul, decide no esperar más y recurre a la inseminación artificial para tener un bebé. Siete años más tarde, regresa a Nueva York, vuelve a ver a su amigo Wally, un hombre neurótico e inseguro que, de manera inexplicable, se siente fuertemente vinculado al hijo de Kassie, un niño con el que comparte algo más que sus múltiples manías y excentricidades.