La muerte le sienta bien
Helen es escritora y Madeline es actriz y ambas se han odiado desde la infancia. Madeline está casada con Ernest, quien fue alguna vez novio de Helen. Después de recuperarse de una enfermedad mental, Helen se dedica a vengarse y empieza por recuperar a Ernest, para luego asesinar a su enemiga. Sin embargo, ambas han tomado una poción mágica que evita el envejecimiento. Accidentalmente descubren, cuando cada una trata de matar a la otra, que las dos son inmortales y que la "vida" nunca más será igual.