Una llamada perdida
Beth se queda traumatizada cuando presencia las horribles muertes de dos amigos, con pocos días de diferencia. Lo más preocupante es que sabe que ambos habían escuchado espeluznantes mensajes en sus teléfonos: grabaciones reales de sus propios, y terribles, últimos momentos. La policía no le cree, excepto el detective Jack Andrews, cuya propia hermana falleció en un extraño accidente que guarda una curiosa similitud con los decesos que Beth reporta.